Cerrando ya el ciclo de posts con la boda de Celia y Miguel, en esta entrada he englobado la cena y el baile.
En esta parte tampoco faltaron los detalles de los novios a sus invitados. Cada persona tenía colocado en su plato un detallito personalizado, donde junto con otras cosillas útiles para la velada, había una tarjeta escrita a mano y dirigida a cada persona en particular… ¡¡ incluso yo tenía la mía!! 😀
Entre comida y comida, hicieron entrega de numerosos ramos, con un significado u otro hacia familiares y amigos.. y hubo momentos en los que saltaron algunas lagrimillas
Se comió realmente bien (doy fe!! 😉 ) , se veían brindis por doquier, pero sobre todo, mucho amor..
Después de la cena hubo vídeo, y entrega de regalos a los novios. Les disfrazaron y les pusieron pruebas realmente duras… como una caja llena de billetes enrollados y pegados con forma de estrellas..
Y tras la cena, vino el baile.
Y tras el baile, secuestré durante media hora a los novios, para aprovechar la maravillosa iluminación de algunos de los rincones de la Finca Prados Moros.
E incluso en el último momento obligamos a posar a la parejita donde fue a caer el ramo de la novia…
Y colorín colorado, este cuento no se ha acabado!! 😀 En unos días podréis ver la postboda, en el estudio y en exteriores.