Hoy quiero dedicar un espacio a actualizar para todos aquellos que no habéis visto el producto final.
Hacía mucho que no hacía fotografía de producto… reconozco que me cuesta ponerme a ello, todo lo contrario que con los retratos y las personas…
Así que esta tarde he sacado la caja de luz, montado los focos, y aprovechando que aún no he entregado uno de los últimos, he decidido hacerle algunas fotos.
Los que me conocéis desde hace tiempo sabéis que me encanta cuidar los detalles, y aunque sería mentir diciendo que ésta será mi presentación de producto definitiva, creo que finalmente encaja prácticamente a la perfección con mi imagen.
El sello de lacre, con mis iniciales, y el pigmento dorado, los compré en Venecia este verano. Me enamoró según lo ví.. algo tan simple como eso para mí significa una pizca de seriedad y sobriedad, una de mis caras.
En la contraportada de la caja, pego una a una pequeñas mariposas, sin un orden ni número determinado, que para mí significan la belleza, armonía y alegría que quiero transmitir en cada una de mis tomas; mi otra cara.
Aunque véis un ejemplo de book, he decidido no seguir un patrón determinado. Siguiendo mi filosofía de personalizar cada sesión, quiero que sea cada uno quien elija qué poner, desde el texto hasta la foto. Dependiendo de su elección, eso sí, seré yo quien decida la mejor combinación de colores para que se mantenga por fuera la misma armonía que se siente cuando uno lo ojea por dentro.
En cuanto al resto, las tomas en papel seda tamaño 20×30, el CD personalizado y el regalo que estoy haciendo a lo largo de estos meses, los Christmas.
lo mejor es cuando te entrega ese maravilloso trabajo en un bar tomando unas cervecitas con ella y poder compartir unos instantes relajados.
Un besazo enorme guapísima
o en un coche una mañana gris mientras das de mamar al protagonista, llenando el día de color…..jeje. el cafelillo queda pendiente….